¡Cuidado con estas tendencias de cocina! 5 errores que te harán limpiar sin parar

La cocina es el corazón del hogar, pero a veces, las modas la convierten en una fuente inagotable de trabajo. ¿Estás pensando en reformar tu cocina? ¡Atento! Hay tendencias que, aunque preciosas, te harán pasar más tiempo limpiando que cocinando. Vamos a analizar cinco de ellas y te daremos alternativas inteligentes para disfrutar de una cocina bonita y funcional.

1. Revestimientos con baldosas diminutas: un imán para la suciedad

• El problema: Baldosas tipo penny, mini subway o mosaicos intrincados son una pesadilla. Cuanto más pequeña la baldosa, más juntas. Y las juntas atraen la suciedad: grasa, restos de comida, polvo... ¡y hasta pelo de mascota!
• La solución: Opta por baldosas grandes, de 30x60 cm o incluso más. Reducirás drásticamente el número de juntas y la limpieza será mucho más sencilla. Otra opción es usar el mismo material de la encimera para el salpicadero, como el cuarzo.
• Un truco: Si te encantan las baldosas pequeñas, elige un color de lechada oscuro (gris o antracita) para disimular la suciedad.

2. Encimeras de madera maciza: belleza con fecha de caducidad

• El problema: La madera aporta calidez y un toque natural a la cocina, pero es muy delicada. El agua es su enemiga: cualquier derrame, por pequeño que sea, puede causar daños. Además, se mancha con facilidad (vino, café, tomate...).
• La solución: Si te gusta la madera, úsala en zonas de bajo riesgo, como una zona de café o una isla pequeña. Para las encimeras, el cuarzo es una opción resistente y fácil de limpiar. El granito también es buena idea, aunque requiere un sellado periódico.
• Mantenimiento: Deberás aceitar la encimera mensualmente, ¡y no vale con un simple frotado! Hay que limpiar, secar, aceitar, dejar que se absorba y pulir. ¡Lleva horas! Y olvídate de cortar directamente sobre la madera: los cuchillos dejan marcas que acumulan bacterias.

3. Microondas sobre la campana extractora: un dos en uno que no funciona

• El problema: Parece una solución práctica, pero en realidad no ventila bien. La mayoría de estos microondas recirculan el aire a través de un filtro, en lugar de expulsarlo al exterior. Esto significa que la grasa y el humo se quedan en la cocina, ensuciando los armarios.
• La solución: Instala un microondas en un armario específico o en una estantería. Si tienes poco espacio, un microondas de encimera puede ser una buena opción.
• Limpieza complicada: Además, limpiar un microondas colocado en alto es peligroso y engorroso.

4. Puertas de armarios con diseños elaborados: la suciedad se esconde en los detalles

• El problema: Puertas con molduras, curvas y detalles ornamentados son preciosas, pero acumulan suciedad en cada recoveco. Limpiar estos armarios a fondo requiere mucho tiempo y paciencia.
• La solución: Opta por puertas lisas o con diseño shaker. Son fáciles de limpiar y no tienen rincones donde se esconda la suciedad.

5. Paneles acanalados: ¡textura con trampa!

• El problema: Los paneles acanalados están de moda, pero sus ranuras atrapan el polvo, la grasa y las migas. Limpiarlos requiere un cepillo o un aspirador con boquilla estrecha.
• La solución: Evita los paneles acanalados en la cocina. Úsalos en otras zonas de la casa, como la entrada o el baño.

En resumen, no te dejes llevar solo por la estética. Piensa en la practicidad y elige materiales y diseños que te faciliten la vida. ¡Tu tiempo es oro!